Horus es uno de los dioses más venerados, importantes y a la vez complejos de Egipto. Fue venerado en todo Egipto, incluso mucho antes de su creación. Las pinturas y otros monumentos conservados que atestiguan su culto datan de hace tres milenios y medio. El Ojo de Horus es uno de los motivos egipcios más famosos, pero poca gente sabe de dónde procede y qué simboliza.

Horus, es un dios egipcio asociado con el sol y la luz, aunque también se le llama dios de los cielos. Se le suele representar como un hombre con cabeza de halcón o como un halcón. Es en forma de halcón como Horus puede volar y supervisarlo todo desde una altura impresionante. Su nombre se traduce como «el que está arriba». Como halcón, se funde con los rayos del sol, y como dios solar a veces se le llamaba Harakheti. Como dios de los cielos, se le llama Harven.

Los habitantes de Egipto distinguían el triple Horus. Una forma es el Horus distante, cuyos ojos eran el sol y la luna; la otra forma es Horus en su plenitud como hijo de Isis y Osiris, pero también se dice que se encarnaba en los faraones y protegía el reino. Este dios es uno de los más antiguos e importantes de Egipto. Fue el primer dios adorado en todo el país y se le dedicaron numerosos templos. Los más famosos se encuentran en Edfu y Kom-Ombu.

Cuando Horus alcanzó la mayoría de edad, decidió vengar la muerte de su padre. Luchó contra su tío Seth, venció y se convirtió en el legítimo gobernante del Alto y Bajo Egipto. Se le conoce como el unificador de la tierra y el primer faraón del antiguo Egipto. Sin embargo, perdió un ojo en esta batalla. A veces se dice que sólo se sacó un ojo, otras leyendas dicen que perdió los dos. En cualquier caso, el ojo le fue devuelto y se lo dio a su difunto padre, permitiéndole una vida después de la muerte.

El ojo de Horus

El Ojo de Horus

Un importante símbolo de Egipto, el Ojo de Horus, también deriva de esta leyenda. Este símbolo (vedjat en egipcio) se pintaba en sarcófagos y pirámides y se le atribuían poderes curativos porque Horus perdió la vista en la batalla, pero se la devolvió: se curó. Este ojo también representa a veces el tercer ojo clarividente, que ayuda a ver la verdad.

Hoy en día, este símbolo se utiliza mucho en diversos círculos ocultistas, y no sólo en Egipto. Da valor, ayuda en las relaciones madre-hijo y también con la clarividencia. Existe incluso una fórmula de encantamiento en la que se pide a Horus que conceda su tercer ojo, permitiendo así al buscador ver psíquicamente.

El Ojo de Horus en relación con la magia

El Ojo de Horus en forma de amuleto se consideraba la protección más poderosa e importante contra las fuerzas del mal. Cuantas más copias de este amuleto se incluían en la tumba de la momia, más aumentaba la protección. La gente también creía que el Ojo de Horus curaba enfermedades oculares y protegía al difunto de maldiciones o mala suerte. También se creía que el amuleto fortalecía el poder del tercer ojo.

El Ankh y el Ojo de Horus

¿Un parecido con Jesús?

El parecido entre Horus y Jesucristo también es notable y, según algunas fuentes, la leyenda bíblica se inspiró en el mito de Horus. Ambos nacieron sin relaciones sexuales, realizaron milagros y resucitaron de entre los muertos. La imagen de Isis con un niño pequeño en brazos se colocaba en la cuna de los niños pequeños para protegerlos de las enfermedades y los malos espíritus, y también se decía que era una prefiguración de la Virgen con el Niño Jesús. Sin embargo, se trata de meras especulaciones.

Fuente: historicaleve

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