Nadie llegaría a pensar que el Antiguo Egipto e Irlanda tendrían algún tipo de relación. Sin embargo, algunos hallazgos podrían encontrar la conexión antigua entre estos dos países separados por miles de kilómetros.

Nuevos descubrimientos en investigaciones de ADN han arrojado nueva evidencia arqueológica que nos presenta un escenario algo complicado.

La Colina de Tara, uno de los sitios más antiguos y sagrados de Irlanda se encuentra rodeada de muchos movimientos de tierra y tumbas neolíticas.

Normalmente se asocian a los celtas, pero este lugar es aún más antiguo que dicha cultura. De acuerdo a su leyenda, es la zona donde gobernó Tuatha De Danann, un ser similar a Dios que arribó a Irlanda en misteriosos barcos y contaba con grandes poderes.

Sin embargo, las exploraciones recientes mostraron qué este lugar no solo guarda relación con la leyenda irlandesa.

Una extraña conexión con Egipto

Piedra del Destino en la Colina de Tara. Crédito: Germán Póo-Caamaño/Wikimedia Commons

Una de las teorías más extrañas que existen en relación a los orígenes de este pueblo irlandés es una posible conexión con el antiguo Egipto.

A pesar de que existen muchas leyendas que conectan a Tara con la realeza egipcia, esto ha sido imposible de probar.

Una de los argumentos más extraños que respaldan a la teoría fue el hallazgo del esqueleto de un niño de 15 años en el Montículo de los Rehenes, cerca de Tara.

Su datación de carbono mostró que los restos tenían al menos unos 3.800 años de antigüedad y poseía un collar hecho de cuentas de loza que coincidían con la fabricación y el diseño de los egipcios.

Realeza egipcia y la Reina Scota

Representación de la llegada de la Reina Scota. Crédito: Dominio Público/Wikimedia Commons

Otra historia que podría relacionar Irlanda con el antiguo Egipto es la leyenda de la Reina Scota, una princesa o reina egipcia que, según que versión de la leyenda se lea, llegó a Irlanda en el 1700 a. C., siendo asesinada por Tuatha de Dannan en una guerra.

Supuestamente su tumba se encuentra marcada por una piedra gigante que tiene un grabado, ubicada en el condado de Kerry y su importancia ha llevado al gobierno a preservarla.

Un aspecto bastante interesante es que la tumba no está lejos de la isla de Skellig Michael, lugar de un asentamiento precristiano.

De acuerdo al Lebor Gabála É renn, un libro que habla sobre invasiones del siglo XI, Milesius, el líder de los invasores de Irlanda, perdió a dos de sus hijos en las cercanías en 1400 a. C., cuando una «tormenta mágica» provocada por Tuatha de Danann hundió el barco.

Hallazgos únicos en ADN

Ahora todas estas leyendas parecen tener al fin una confirmación, y es que expertos de Trinity Collage de Dublín y de la Universidad de la Reina de Belfast, realizaron una publicación en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.

Enseñan nuevos hallazgos de antiguos irlandeses que no solo se relacionan con gente del sur de Europa, sino que tuvieron conexión con Medio Oriente.

Gracias a esta nueva información se viene una expectante explicación para un cráneo de simio que se encontró en Tara y que generó gran controversia dentro de la arqueología y que podría conectar a un vínculo etimológico previamente inexplorado de Tuatha De Danann.

El significado de esta misteriosa raza se le atribuye como el Pueblo de Danu, una diosa madre de la mitología irlandesa.

Pero las primeras grabaciones de los Tuatha no incluyen la última palabra de Danann, sino que lo describen como Thatha De, o Tuatha Di.

De hecho, tan solo desde el siglo XIX, la descripción actual de Danu era aceptada por los estudiosos.

Pero ahora existe nueva información sobre sus orígenes y los dioses a quienes adoraban y, sorprendentemente, uno de estos dioses fue Thoth, llamado Hermes por los griegos tiempo después.

El Dios Thoth, adorado en Irlanda

Thoth representado como un babuino. Crédito: Dominio Público/Wikimedia Commons

Thoth era el dios de la Luna que, se creía, había traído la sabiduría y la escritura al mundo. Normalmente era representado por un babuino o un simio al norte de áfrica ¿Podría ser esta la razón de haber encontrado restos de un simio en Irlanda?

Más curioso aún son las variantes etimológicas olvidadas de Thoth: Thoout y Thaut. Cuando se buscan comparaciones fonéticas en los jeroglíficos egipcios, podemos encontrar algunas muy parecidas a la de los Tuatha de Danann.

«Thoout Dai» significa «la travesía de Thoth», Thoout Dat significa «el viaje de Thoth en barco» y Thoout Da significa «la tormenta de Thoth».

Todas esas similitudes fonéticas concuerdan con las descripciones usadas por el pueblo legendario en su llegada a Irlanda.

Otro factor que revela la omisión de dichas traducciones en el siglo XIX es que la piedra de Rosetta  y el desciframiento de los jeroglíficos por parte de Champollion, solo se dio en 1820.

Los primeros monjes cristianos que registraron estas historias no tenían el conocimiento de tales traducciones fonéticas.

De hecho, la mayoría de aquellos que estudiaron la mitología irlandesa en el siglo XIX no conocían el trabajo de Champollion.

Eliminando los elementos más extraños del mito y la tradición, sigue habiendo cuestiones sin resolver que la nueva evidencia científica propone irremediablemente.

Algunas se encuentran siendo debatidas y cada avance tecnológico agrega una pieza al enmarañado puzzle.

Aunque pensar en una conexión de Egipto con Irlanda en el pasado era considerado loco y descabellado, se ha descubierto que esta cultura si se relación con otras lejanas ¿Cómo lo hicieron? No existe una respuesta real para ello, pero las evidencias están.

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