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Vigilantes y el Libro de Enoc: ángeles caídos y su conocimiento prohibido
Desde de su descubrimiento, el Libro de Enoc ha conseguido que muchas personas cuestionen los escritos que la biblia nos había enseñado; ese es el caso de los Vigilantes. ¿Quiénes eran realmente estos seres?
Enoc fue un profeta bañado por la gracia de divina. Fue quién alertó sobre la Inundación, bisabuelo de Noé y una de las primeras personas que tuvo la dicha de ver a Dios.
Fue un hombre que consiguió almacenar todos los secretos y el conocimiento que se les había dado a seres divinos y los escribió para que la humanidad pudiera disfrutarlos durante toda su existencia.
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Sin embargo, una de la información más importante que podemos encontrar solo en sus libros, es sobre los «Vigilantes», unos personajes misteriosos que continúan siendo el talón de Aquiles de los académicos.
Los Vigilantes en el Libro de Enoc
La información más importante sobre estos seres la podemos encontrar en el Libro de Enoc, un texto que, supuestamente, se encuentra dividido en cinco libros diferentes.
Los expertos creen que estos libros se escribieron en diferentes épocas y redactado por varios escritores hasta que llegar a la versión más actual que podemos encontrar, escrita antes del año 100 d. C.
Los «cinco libros» a los que hacen referencia los académicos serían los siguientes:
- El Libro de los Vigilantes (Capítulos 1-36) Siglo III a.C.
- El Libro de las Parábolas (37-71) Siglo I a.C.
- El Libro de las Luminarias Celestiales (72-82) Siglo III a.C.
- El Libro de las Visiones de Sueños (83-90) Siglo II a.C.
- El Libro de la Epístola de Enoc (91-107) Siglo II a.C.
Según el texto que data del Siglo III a.C., existían al menos 200 vigilantes que se rebelaron contra los designios de Dios en el Cielo.
Esta rebelión estuvo encabezada por dos ángeles; Semyaza y Azazel. Así, los vigilantes bajaron hasta el Monte Hermón, en la Tierra, donde se relacionaron con los humanos, procreando con las mujeres.
Esta unión derivó en el nacimiento de una raza híbrida de gigantes, violentos y salvajes que llenó de caos y destrucción el mundo, lo que generó el Gran Diluvio Universal.
Las nuevas investigaciones sobre el Libro de Enoc
Joseph Lumpkin, un reconocido académico e investigador, fue responsable de la ampliación del conocimiento de Enoc al incluir nuevas investigaciones sobre los Ángeles Caídos, los Vigilantes y los Nephilim.
Después de haber presentado claros registros históricos, además de extensas traducciones del Primer, Segundo y Tercer Libro de Enoc, el investigador construyó toda una narrativa cronológica sobre estos seres.
Así se sabe que este texto antiguo y sagrado posee detalles bastante importantes sobre los Vigilantes, a pesar de que no existe un registro completo de los 200 nombres que se revelaron.
Aun así destacan algunos de los personajes más importantes de esta rebelión, como son los ya mencionados Semyaza y Azazel. Este último sería considerado, más tarde, como un demonio e incluso, asociado directamente con Lucifer o como uno de sus más importantes aliados.
Sin embargo, y a pesar de toda esta oleada de atributos negativos que asociaron históricamente a estos personajes por ir en contra de la voluntad de Dios, fueron ellos los que enseñaron a la humanidad muchas de las cosas que sabemos en la actualidad y que sin ellas, nuestra vida hubiese sido totalmente diferente.
Ellos enseñaron a los humanos a practicar la medicina, les hablaron sobre la ciencia y la tecnología, les enseñaron a trabajar la tierra y a usar los recursos naturales para fines creativos o estéticos. Fueron ellos los que enseñaron a trabajar el metal, a conocer el universo que nos rodea y las artes místicas.
Todos estos conocimientos fueron una especie de regalo otorgado por los Vigilantes para la humanidad. El problema es que también les enseñaron el arte de la Guerra.
¿Qué eran los observadores?
Como castigo por haber dotado a la humanidad de estos conocimientos, Dios provocó el Gran Diluvio Universal para eliminar de una vez por todas todo rastro de los Vigilantes y su paso en la Tierra. Esto incluyó a los gigantes y todos aquellos humanos que dominaran los conocimientos prohibidos.
Aun así, algunos de estos seres consiguieron sobrevivir, huyendo a otros lugares remotos de la Tierra donde continuaron con la labor de enseñar a la humanidad el conocimiento prohibido.
Así sabemos que los Vigilantes jamás pudieron ser destruidos completamente y todos sus secretos se extendieron por generaciones posteriores y en varias culturas del planeta. De hecho, se podría decir que todo lo que sabemos en la actualidad, tendría una base en tales conocimientos.
Pero ¿Quiénes eran estos seres a los que les debemos toda nuestra sabiduría? Tanto los Vigilantes, como sus descendientes, los Nephilim, siguen siendo un misterio.
Algunos creen que realmente eran Ángeles divinos, otros creen que no tenían nada de «celestial», aunque si poseían un linaje puro al ser descendientes directos de Seth.
Como podemos observar, la historia de los Vigilantes aún se encuentra en un punto entre lo desconocido, lo teórico y lo irrefutable, lo cual no aclara todas las dudas sobre su existencia. ¿Quiénes fueron, por qué le brindaron todos esos conocimientos a la humanidad? Son cosas que aún se desconocen totalmente.
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