Un gran misterio de la historia es el de los Gigantes de Cachemira de Delhi Durbar. Una serie de registros fotográficos que muestran hombres de un tamaño muy superior a lo normal.

En 1903, se llevó a cabo un evento llamado Delhi Durbar en Delhi, India, un gran evento de celebración en honor a la coronación del monarca británico Eduardo VII.

Se suponía que el propio rey estaría presente, pero por alguna razón se negó a asistir y se decidió hacer el evento aún más brillante y magnífico para compensar la ausencia del héroe de la ocasión.

Los preparativos para la celebración se habían estado preparando durante casi dos años, y la ceremonia comenzó el 29 de diciembre de 1902.

Primero, elefantes vestidos con colores brillantes caminaron por las calles de Delhi, que fueron observados con entusiasmo tanto por ciudadanos comunes como por numerosos gobernantes indios de diferentes lugares y sus príncipes herederos.

El 1 de enero de 1903, se abrieron numerosos pabellones en una gran llanura cerca de las afueras de Delhi, diseñados para enfatizar la gloria de la monarquía británica y el vasto Imperio Británico.

Entre otras cosas, allí se exhibió una colección de piedras preciosas, que rara vez se podía ver en un solo lugar. Según uno de los testigos presenciales, el británico Lord Curzon, los príncipes hindúes y sus padres quedaron fascinados al ver estas joyas.

El propio Curzon llegó a los pabellones con ellos, sentado sobre un elefante, cuyos colmillos estaban decorados con un forro dorado. Pero no fueron las joyas y los magníficos elefantes los que resultaron ser la vista más impresionante de este lugar, sino dos enormes guardias que «robaron» por completo toda la atención de la audiencia.

Se dijo que el maharajá de Jammu y Cachemira llevó consigo a estos dos gigantes a Durbar. Muchos, al mirarlos, los llamaron audazmente «los más altos de todas las personas vivas en la Tierra».

Uno de los gigantes de Cachemira medía 2.36 metros de altura, el otro 2.23 metros. Según las fuentes, eran hermanos gemelos. Se usaban especialmente sombreros altos en la cabeza, lo que creaba la ilusión de una altura aún mayor de los gigantes.

Estos hermanos eran tiradores de élite que dedicaron sus vidas al servicio de su maharajá. Se informó que eran de un lugar llamado Balmokand, pero este lugar no dice nada a los historiadores y geógrafos modernos, nadie ha descubierto aún dónde estaba.

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Los hermanos llegaron a Durbar armados con lanzas, mazas e incluso granadas de mano. Parecían estar listos para cualquier situación para proteger a su maharajá a toda costa.

Cada uno de ellos tenía un elefante personal y acompañaba al maharajá dondequiera que fuera. Los periodistas y fotógrafos internacionales que se reunieron para el Durbar también quedaron fascinados con estos gigantes y escribieron muchos artículos entusiastas sobre ellos. Estos gigantes hicieron famoso al gobernante de Cachemira en todo el mundo.

Había muchas fotos de estos hermanos, pero la más famosa fue la imagen en la que el viajero y fotógrafo estadounidense James Rickalton fue retratado entre los gigantes.

Su cabeza está a un nivel por debajo del pecho de sus hermanos. Después del Durbar, Rickalton y su colega fotógrafo George Rose viajaron a Cachemira, donde tomaron más fotografías de los gigantes.

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Se desconoce qué pasó con los hermanos gigantes más tarde. Entre otras cosas, se desconocía qué enfermedad causó un crecimiento tan grande, si tenían problemas de salud, a qué edad morían y si tenían hijos.

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